Lagrimas de ELLAS disminuyen el deseo sexual de ELLOS.
Un estudio del Instituto Weizmann de Israel ha demostrado que las lágrimas de las mujeres no son sexys, ya que contienen señales químicas capaces de bajar el nivel de testosterona en los hombres,
una hormona directamente relacionada con el deseo sexual.
Para realizar el estudio, los investigadores israelíes recolectaron lágrimas frescas de mujeres que vieron películas tristes o emotivas. Luego, las dieron a un grupo de hombres para que las
olieran, sin decirles qué estaban oliendo, antes de someterlos a dos exámenes.
Con el primer examen se comprobó que los hombres que olieron las lágrimas de las mujeres tristes sintieron menos atracción sexual por los rostros femeninos, que los hombres del grupo control que
olieron lágrimas artificiales. Mientras que el segundo examen demostró que sus niveles de testosterona, medidos en saliva, disminuyeron en promedio un 13%
Además, usando una técnica de resonancia magnética funcional observaron que, al oler las lágrimas femeninas, se disminuyó la actividad en partes del cerebro relacionadas con el deseo sexual, como
el hipotálamo.
Según los científicos que realizaron la investigación, sólo las lágrimas femeninas de tristeza ocasionan disminución del deseo sexual en los hombres. Esto ocurre porque su composición química es
distinta, por ejemplo, a la de las lágrimas que se derraman como reflejo cuando una basura entra al ojo.
Hasta ahora se desconocía la finalidad biológica del llanto, pues se sabía que la función principal de las lágrimas era limpiar y proteger los ojos frente a agentes dañinos: Pero, con esta
investigación se demostró que las señales químicas que envían las lágrimas de emoción, son utilizadas inconscientemente como escudo protector. Noam Sobel, uno de los investigadores del Instituto
Weizman, dijo a The Guardian que básicamente, con esas lágrimas lo que se logra es protegerse cuando se está “en un estado vulnerable”.
El estudio, publicado por la revista Science, también pretendía medir el efecto de las lágrimas masculinas, sin embargo, no consiguieron suficientes voluntarios que lloraran durante la proyección
de una película triste, para recolectar suficientes lágrimas. Por lo cual, esta investigación quedará pendiente.
Fuente:http://www.atusaludenlinea.com